Es una de las cremas recurrentes en pastelería, bien como relleno, bien como acompañamiento de tartas, postres, lionesas, y pastelitos de bocado en general.
Ingredientes:
1/2 l de leche
La piel de 1 limón
1 ramita de canela
4 yemas de huevo
150 g de azúcar
45 g de Maizena
Modo de hacerlo:
Lleva a ebullición 1/2 litro de leche con la piel de un limón y una ramita de canela. Trabajar con unas varillas las 4 yemas de huevo con los 150 g de azúcar hasta obtener una crema espumosa. Añadir 45 g de maizena (previamente desleída en un poquito de leche) y vierte en hilo la leche colada. Cocer a fuego medio removiendo con las varillas hasta que la crema espese.
Verter en un bol y dejar enfriar.
Mi truco:
Si se te formasen grumos, pasa la crema por un colador o tritúrala con la batidora eléctrica. Para evitar que, al enfriarse, se forme una película sobre la superficie, pasa por encima un tricito de mantequilla o cúbrela (aún caliente) con un film transparente, de forma que éste toque directamente la superficie.